Lo que todo el mundo debería saber sobre pies plano y calzados
Por: Jean Otero, M.A.Ed, PTA
Quizás haya escuchado este término muchas veces. La gran mayoría le llaman sobre pronación o ausencia del arco del pie. Esto es muy común en infantes cuando están empezando a caminar y la razón es muy simple. Los niños cuando empiezan a caminar todavía no han desarrollado suficiente fuerza en los músculos intrínsecos de los pies, lo cual promueve la ausencia o disminución del arco. El mismo no es muy visible o se desarrolla completamente hasta los dos años de edad. Incluso puede tardar más dependiendo cuánta exposición tenga el niño a caminar. A veces se le diagnostica con bajo tono muscular (hipotonía muscular) si no desarrolla apropiadamente este arco.
Pies Plano
Hoy día, se habla mucho del caminar descalzos y la gama de beneficios que esto les brinda a los niños, pero pocos hablan de seleccionar un calzado adecuado. Yo, (terapeuta físico) soy un fiel creyente de exponer a los niños a caminar descalzo y lo promuevo en todas mis terapias e inclusive como padre, también, con nuestra pequeña Stella. No cabe duda que al realizar esto incrementamos el balance, se mejora la entrada de nuevos estímulos sensoriales y la propiocepción y se incrementa la fortaleza en los músculos intrínsecos de los pies. Caminar descalzos es algo que fácilmente podemos aplicar en nuestro hogar para ayudar a nuestros pequeños a mejorar el arco del pie y ayudarlos a mejorar su patrón de marcha.
Cartílago suave—-Hueso
¿Ahora bien, qué pasa cuando salimos del hogar o ya no estamos en el patio de la casa? ¿Por qué es importante seleccionar un calzado adecuado? El pie es una estructura anatómica compleja que se compone de 26 huesos. Estos huesos están diseñados para sostener el peso de todo su cuerpo, adaptarse a superficies no estables y amortiguar el golpe en cada paso. Los pies de los bebés en sus comienzos se componen de más cartílago que de hueso y no es hasta los dos años aproximadamente que la estructura del pie se desarrolla por completa. Es importante mencionar que el fortalecimiento total de los huesos de los pies no se desarrolla por completo hasta los 18 años de edad aproximadamente. Este aprendizaje nos ayudará a tener una idea más clara de la importancia de cuidar los pies del bebé, especialmente en el comienzo de aprender a caminar.
¿Cómo selecciono el calzado adecuado para mi bebé?
A continuación seis (6) recomendaciones que la American Academy of Pediatricians (AAP) nos menciona:
El calzado debe ser liviano y flexible para soportar el movimiento natural del pie con una base de soporte estable.
El calzado debe ser de cuero/piel o de malla para permitirle a los pies del bebé respirar más cómodamente.
El calzado debe ser de suela de goma para aumentar la tracción y prevenir el resbalarse.
Evite el calzado apretado. Esto causa deformidades en el pie, debilitamiento y pérdida de movilidad.
Seleccione el calzado de acuerdo al molde del pie de su bebé.
Seleccione calzado con buena absorción y suela duradera, a medida que su bebé participe en actividades de mayor impacto.
Calzado según la edad
-No caminantes: los bebés que gatean o no caminan no necesitan calzado. De colocarle calzado pudiera ser “booties” o calzado que no doble su pie. Debe ser flexible en vez de rígidos y muy importante, que sea a la medida del molde de su pie. La función del calzado en estas edades es de protección y mantener el pie cálido.
-Calzado para principiantes (aprendiendo a caminar): Seleccione calzado liviano ya que en esta edad los niños utilizan demasiada energía. Utilice calzado de cuero o calzado de lona para brindar más seguridad. Recuerde brindarle la oportunidad de caminar descalzos en superficies seguras.
-Calzado para niños a nivel escolar: definitivamente el estilo, moda y colores es la prioridad para los niños y padres a esta edad, pero recuerde que lo más importante es la capacidad de absorción del impacto y la protección. Existen variedades como los calzados deportivos, sandalias, calzado todo terreno, por mencionar algunos. Siempre recuerde seleccionar el calzado adecuado de acuerdo al tipo de actividad a la que se expone su niño para prevenir lesiones. No olvide tomar en consideración el que sea un calzado flexible, que tenga ventilación y no le quede ajustado.
Conclusión
Evitemos comprar zapatos por comprar. Seamos conscientes de la importancia de mantener un buen cuidado de los pies en los infantes. Recordemos que no es hasta sus 18 años de edad en la cual sus pies se terminan de desarrollar por completo. Bríndele actividades variadas que incluyan la estimulación sensorial, actividades o ejercicios que fortalezcan los músculos intrínsecos de los pies y actividades que envuelvan el balance y la propiocepción de los tobillos. De esta manera nos aseguramos de brindarles una base sólida en el proceso de su desarrollo y minimizamos las posibilidades de complicaciones en los pies y/o desalineamientos que afecten su patrón de marcha.
Conoce algunas actividades para mejorar el pies plano aquí